Gayxample, nueva serie de temática homosexual, nace con el objetivo de "normalizar" la vida cotidiana del colectivo.

Después de varias producciones ambientadas en Madrid –entre ellas la película Chuecatown o la serie de Telecinco, Sexo en Chueca– el famoso barrio barcelonés del Eixample, y en especial su zona de bares y establecimientos gays conocida como Gayxample, sirve de escaparate para acoger una de las sitcoms más independendientes de los últimos tiempos. 

Apenas cuenta con un presupuesto de 30.000 euros para diez capítulos de 15 minutos de duración. El italiano Giuseppe Storelli ha dirigido durante nueve semanas a un reparto de actores que apenas han visto ni un céntimo por su trabajo. Al contrario. Muchos han tenido que ejercer de improvisados maquilladores para que el proyecto llegara a buen puerto.

"Gayxample es una realidad gracias al empuje y a la ilusión de todo el equipo", aclara Storelli.

La comedia narra la vida de un grupo de conocidos tras la llegada de Xavi, un chico de pueblo que aterriza en Barcelona con demasiados prejuicios. A partir de aquí se teje una historia común entre siete protagonistas, entre los que destaca una inmigrante argentina (Alicia), un voluntario de la Coordinadora Gay de Barcelona (Toni) y una trabajadora social en busca de causas perdidas (Montse).